miércoles, 31 de diciembre de 2008

Las ratas, todas iguales

Y toda la rabia de los nuevos chicos que nos miran con indiferencia, sobrecogidos en su ignorancia que es lo unico que nos hace sentir mejor. Y ellos se divierten y nos miran divertidos. Nos alejan del mundo, nos hacen sentir que no pertenecemos, divertidos e indiferentes. Nada los puede lastimar porque son muy "cool" para ser lastimados. La frialdad pura, sin crueldad. Nos alejan, nos espantan y nosotros somos fragiles, nosotros nos rompemos con la mas pequeña piedra.
Somos sus bufones y nos llena de ira, y los juzgamos y ellos nos miran, vacios, sin nada adentro. Y son tantos los que nos miran, diciendonos que no. Diciendonos que no importamos, que somos menos. 
No nos molesta directamente, pero de cierta forma nos expulsa (gracias a dios) de la sociedad en la que vivimos.

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